fbpx

Ataúlfo Argenta

Ataúlfo Argenta

Nombre completo Ataúlfo Exuperio Martín de Argenta Maza, nació el 21 de Noviembre de 1913, hijo de Don Juan Martín Argenta y Doña Laura Maza. Nació en el domicilio de sus padres en la calle Jose María Pereda, 5, piso 3º (Castro Urdiales).

El 30 de Enero de 1958 se hace constar en acta «por el nombre de Ataúlfo Argenta a la plaza de Ensanche existente frente a la nueva iglesia en la avenida de la República Argentina, en el centro de la cual será levantado un monumento con el busto del gran músico hijo predilecto de la ciudad, sobre un artístico pedestal. Colocar una placa condecorativa en la casa donde nació el artista y concederle a título póstumo la Medalla de Oro de la ciudad…».

No fue nunca un niño prodigio. Estudió en el colegio que regían los hermanos de la Doctrina Cristiana.

Desde muy pequeño ya se acusaba su fácil instinto, como el buen oído y la capacidad de asimilación, tenía una bonita voz tiple y pronto actuó como solista del coro.

Las condiciones económicas de su familia no le permitían estudiar la carrera de música debido a que era muy caro, pero el Círculo Católico, de donde el padre de Ataúlfo era socio, acordó el acta del día 31 de Octubre de 1925 la creación de clases gratuitas de solfeo, piano y violín para los hijos de los socios que carezcan de medios. Así empezaron los primeros conciertos de Ataúlfo.

En 1927 se transladan a Madrid al ver en peligro de anularse las cualidades artísticas en caso de que no se marcharan. En Madrid estudió, solfeo, violín… armonía, composición…

Pero Argenta quiere ser pianista y lo demás lo cursó con facilidad muy grande pero sin orden ni disciplina.

En Junio de 1930 concluye el año último, logra el Premio Extraordinario. El 4 de Febrero de 1931 actúa en un concurso que tiene el incentivo que el ganador ha de llevarse, un piano de cola otorgado por la famosa cantante Cristina Nelsson.

Pocos días antes a este concurso había muerto su padre, duro golpe puesto que le consideraba su mejor amigo.

A su mujer la conoce en el año 1928, ambos pertenecían a la Masa Coral de Madrid.

Ataúlfo se va a Bélgica, en particular se traslada a Lieja por dos motivos: uno artístico, porque el conservatorio de la ciudad es muy prestigioso y puede convenirle estas nuevas experiencias y recibir las enseñanzas de maestros tan destacados como Jean Du Chastein (pianista y armand marsik en la composición).

Pero su salud está muy débil y este clima le perjudica y tiene que conseguir una beca para ir a Bruselas donde puede un pianista encontrar buen campo de conciertos y recitales, aquí también se reencuentra con su novia.

Tras unos años en Bruselas regresa a Madrid. Continuando sus clases con Alberdi. Trabaja en mil cosas diversas. Corrige ejercicios de quien se ha de examinar, prepara, ensaya y acompaña a oposiciones y concursos; toca el piano en donde surge un contrato…

En los más perdidos estantes de su casa bien ocultas para que nunca tenga la tentación de revisarlas, conservaba «Rapsodia Montañesa» y «La Danza de Quiche Venack» para orquesta únicas obras de este género que se decidió a escribir; una zarzuela inédita, «María de la Pena». También para el coro, entre las que merecen particular mención «Al cocer el pucheruco y La voz del agua».

Cuando Argenta, como hijo único de viuda estaba exento del servicio de las armas, se presentó en el puesto de la guardia civil, para ofrecerse, fue traladado a Salamanca y de ahí a Segovia, Aguilar de Campo y Cistierna. Durante la Guerra Civil se casa con Juanita.

En 1939 regresa a Madrid donde la vida es dura porque no hay conciertos. El 27 de Abril de 1941, está en Barcelona donde Wolff le encarga un concierto como solista. Wolff es el que le enseña la tranquilidad que es el mayor enemigo de la vida de Ataúlfo, y a partir de ahí le empieza a ir mejor la vida. En Radio Nacional de España dirige un programa de Mozart.

En 1945, Don Bartolomé Pérez Casas el venerable titular de La Orquesta Nacional está delicado de salud y ha de limitar sus actuaciones. La comisaría de la música y la junta directiva de la Asociación de cultura musical piensan que en Argenta se dan calidades que han de tener muy feliz campo en la gran orquesta. Argenta le preocupa no sólo su repertorio sino también el conocer todo en cuanto a su arte. Ensaya la «2ª Sinfonía de Brahams» obra de repertorio, que muchas de nuestras ilustres batutas condujeron a nuestros músicos.

En 1948 ya se confirmó la titularidad de Ataúlfo Argenta como director de la Orquesta Nacional. Tras haber realizado conciertos por toda Europa y cuatro en Argentina muere en Los Molinos el 20 de Enero de 1958.

 

(Este trabajo ha sido realizado por los alumnos de 2°C de BUP durante el curso 96/97 en la asignatura de Informática)

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.plugin cookies

ACEPTAR
Aviso de cookies